El Modelo T

Hasta este momento, el automóvil había sido poco más que un juguete para los ricos. Ford sabía que era el momento correcto y que la oportunidad estaba a su alcance para convertir el automóvil en una necesidad en vez de un juguete. En 1902, había un automóvil por cada millón y medio de personas en los Estados Unidos; para 1909, había un automóvil por cada 800.

Continuando con las letras del alfabeto, el automóvil de sus sueños se llamó Modelo T, y cuando el sonido de su motor apareció en la historia en octubre de 1908, el mundo cambió. Sus virtudes utilitarias de ligereza, simplicidad y potencia hicieron del Modelo T un éxito inmediato.

El Modelo T era sencillo, ligero y resistente; antes de Ford Motor Company, la mayoría de los automóviles en el mercado eran máquinas temperamentales, poco fiables; el Modelo T se convirtió en el símbolo de transporte barato, confiable, que podía circular sobre caminos sin pavimentar, a menudo enlodados, donde otros automóviles no podían. El automóvil se ganó la aprobación de millones de personas quienes con afecto lo apodaron "Tin Lizzie".